El deporte ha conseguido consolidarse como uno de los pilares para la integración más importantes que tenemos, ya que ha demostrado, si es que de verdad era necesario, que cualquier persona puede hacer todo lo que se proponga ella sola.

Y de este deseo nace el I Torneo Ramón Torres, una colaboración de la asociación Crecer en Positivo con el club Básquet l’Horta Godella, un campeonato de baloncesto dirigido a jugadores con discapacidad intelectual, que se celebrará en Godella entre el 21 y el 23 de junio, y que está patrocinado por Acción Informática. Este torneo busca dar la oportunidad a los jugadores de pasar más minutos en el terreno de juego, ya que, a lo largo de la temporada, apenas juegan tres partidos para conseguir el acceso al Campeonato de España. El torneo busca dar también reconocimiento a la magnífica labor de la asociación sin ánimo de lucro Crecer en Positivo, la cual se esfuerza a diario para cubrir las necesidades y deseos insatisfechos en lo que respecta al Deporte y Ocio de las personas discapacitadas intelectualmente o con necesidades especiales.

El deporte inclusivo ha tenido una sobrexposición mediática recientemente tras el estreno de Campeones, una película con gran éxito comercial sobre un equipo de baloncesto con discapacidad intelectual y que hace unos pocos meses se llevó el Goya a Mejor Película.

Homenaje a Ramón Torres, uno de los grandes olvidados del deporte español

El torneo se celebrará como homenaje a Ramón Torres, uno de los deportistas paralímpicos con mejor palmarés de la historia española, ya que cuenta entre sus manos con dos campeonatos mundiales, tres europeos, cinco de selecciones autonómicas y 14 nacionales de club.  Así mismo, también conquistó la medalla de oro de las Paralimpiadas de 1992 y la de Sídney en el 2000, aunque esta última se la quitaron tras uno de los mayores fraudes del deporte paralímpico.

El escándalo, perpetrado por la Federación Española de Deportes para Discapacitados Intelectuales (FEDDI), se produjo cuando la selección española ganó la competición con solo dos jugadores (de un total de doce) con algún tipo de discapacidad intelectual real, con el objetivo de conseguir más subvenciones y patrocinios. Ramón fue uno de los dos jugadores que dijo la verdad sobre su condición y, sin duda, uno de los grandes perjudicados tras este escándalo, ya que le afectó física y psicológicamente durante mucho tiempo. Su historia ha sido recogida recientemente en el documental “King Ray”, un homenaje al exjugador paralímpico que se estrenó recientemente en la plataforma Filmin.

Este escándalo supuso la retirada de las medallas, la devolución de subvenciones conseguidas, una multa y la desaparición de los equipos de discapacitados psíquicos en el deporte paralímpico, una decisión que hoy en día se sigue manteniendo.